Sin embargo, la implementación de las aplicaciones habitualmente disponibles en un sistema domótico de capacidad media puede encarecer el coste final respecto a éste.
La palabra domótica nos puede sonar a algo futurista, pero es un concepto de lo más real y, sobretodo, actual que nos permite reducir el consumo energético de nuestros hogares.
Un control que no sólo es manual o, mejor dicho, táctil: la mayoría de las unidades domóticas disponibles en el mercado también implementan sistemas de reconocimiento de voz.