El acto de conciliación, que también e denomina juicio de conciliación, (v.), procura la transigencia de las partes, son objeto de evitar el pleito que una de ellas quiere entablar.
Eso, a fin de cuentas, mostraría flexibilidad por tu parte, tolerancia, transigencia, voluntad de negociar - - todas las cosas que oímos por todos lados que son buenas.
Entretanto, si el matrimonio y la paternidad deben sobrevivir como instituciones sociales, es necesaria cierta transigencia ante el dilema existente entre la monogamia perpetua y la promiscuidad.